Flamea, la luz es tan sólo un toque de lo que conlleva sentirse a su lado...
La voz se convierte en aroma, y deja un eco que tan sólo el arruyo de lo cristalino apacigua lo intervolcánico...
Cuando aquello se torna interno lo cálido lo acompaña, y se derrama; Efecto bermellón...
El susurro, la serenidad, un límite que acompaña lo onírico. Una fuerza que hace que todo sea posible, y lo es... lo hacemos así, como queremos.
El gusto por la vida, mover lo intrínseco, impulsos de la existencia...
Una lagrima, otra... un párpado henchido de sentir distancia, una sonrisa complice y esperanzadora. Realidad pintada de belleza y por ella... cruda y dura, MARAVILLOSA.
Siento, ¿Sientes?... lo siento, lo pienso y matizo cada una de las alternativas.
2 comentarios:
Torrentes de luz en el choque fantástico de dos miradas que se buscan, y la proximidad próxima desbarata corrientes de lentitud auxiliares... todo más cerca de lo que uno pensaba, y la punta de lengua se irrita por dar a conocer esa respuesta que tanto se hace desear, y casi la grito... esperemos que caiga...
Flamea...do .. de Moe.
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